El Guapo Ganímedes

El guapo Ganímedes apareció en la pensión la misma noche que una luz mala cruzó sobre el chaperio del barrio.

Parco de palabra, el guapo Ganímedes era corto de estatura pero no de guapeza.
Se equivocaba fiero el cristiano que de él se burlaba, o le señalaba lo gris plateado de su cien pelada. El guapo Ganímedes tenía una nostalgia de dos por cuatro que se reflejaba en sus enormes ojos negros que sin pupila miraban clavados la noche estrellada.
Dicen en el barrio que fue él quien incluyo a las estrellas celosas y el rayo misterioso en la misma letra de “El día que me quieras”.
Una noche en el arrabal, cruzo la mirada con el guapo Sosa que era conocido por su rapidez para solucionar a puro tajo cualquier contradicción y fue así como sin mediar palabra el guapo Sosa lucio su filoso y arremetió derecho viejo contra Ganímedes, que sin dudar y en un instante saco su bufoso de rayos gamma y de un saqué vaporizo al guapo Sosa y junto con él a medio arrabal…
Nunca más se supo nada del guapo Ganímedes… se comenta que volvió a sus pagos allá en una de las más grande de las lunas de Júpiter.
Mr.Wolf delirando un rato
-con tablet y photoshop-