Sentado en la Plaza de los 33, aprovechando la calidez del solcito de mayo y con mis 31 años a cuestas; no me queda otra que alimentar a las palomas. Quién halla echo esta actividad algún tiempo, habrá notado que una de cada 4 palomas tiene una deformidad o amputación en unas de sus patas, generalmente carecen de un dedo, dos y hasta en algunos casos de una patita entera.El ver estas palomas mutiladas es sin dudarlo un espectáculo deprimente -Me pregunto que pensarán los viejos que las alimentan diariamente de esto?-.Intenté en mi mente encontrar un explicación para este fenómeno...y directamente me remonte a la utilidad militar de las palomas, como todos saben los ejércitos del mundo han utilizado estas aves desde tiempos inmemoriales, obteniendo de ellas un rápido y confiable medio de comunicación. ¿Serán acaso estas palomitas mutiladas, veteranas de conflictos mundiales?. Y entonces mi mente proyecto un corto donde una palomita militar, que cansada de recorrer el largo camino entre el infierno de la batalla de Somme hasta el cuartel aliado en París, decide posarse sobre un montículo en un tranquilo páramo cubierto de putrefactos cadáveres de dragones franceses, entonces en ese instante que posa sobre el terreno: KABOOM! una infame mina antipersonal se activa.
Claro que la simple mutilación del ave es imposible, entonces mi imaginación terminaba el corto con un montón de plumitas difuminándose con el resabio humeante de la explosión.Así que es muy posible que las palomas de la plaza de los 33 no participasen en conflicto armado alguno.
Agotadas las migajas volví a mi transitar si respuesta.
Hoy alguien me digo que lo que les pasa es una deformación por plombenia.
Y ahora vuelvo a tener esa necesidad de ponerle una boina y un corazón púrpura a cada palomita mutilada.
Mr.Wolf con Pilot 0.5 y Photoshop
